Se trata de dos propuestas tandilenses, dentro de las 451 presentadas enfocadas en soluciones para el acceso a la alimentación y al agua segura, elegidas en la convocatoria “Ciencia y Tecnología contra el Hambre”. Una de ellas apuesta al desarrollo de un programa piloto de acompañamiento de Pequeñas Unidades Productivas de Alimentos y otra, a modo de cooperación interuniversitaria, con el “Plan Argentina contra el Hambre”.
El Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación, (MINCyT), junto con el Ministerio de Desarrollo Social y el Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales, presentaron los resultados de la Convocatoria “Ciencia y Tecnología contra el Hambre”.
De 461 trabajos presentados, orientados a impulsar y fortalecer la integración del conocimiento y de los desarrollos tecnológicos y sociales enfocados en soluciones para el acceso a la alimentación y al agua segura, resultaron seleccionados 147, presentados por 51 instituciones científicas y tecnológicas en las 23 provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y en más de 70 localidades, de los cuáles dos comprenden a la Unicen.
Dentro del rubro Proyectos de Investigación y Desarrollo una de las propuestas escogidas pertenece a la Universidad Nacional del Centro (Unicen) y se basa en “Soberanía y seguridad alimentaria: Desarrollo de un programa piloto de acompañamiento de Pequeñas Unidades Productivas de Alimentos (PUPAs) en la región de Tandil”, que plantea una inversión estimada en 1.800.000 pesos.
Mientras que otra de las iniciativas elegidas se desarrolló a modo de cooperación interuniversitaria federal con el “Plan Argentina contra el Hambre” y fue presentada desde la Universidad de Quilmes (Unqui) proponiendo “Alternativas territoriales de circuitos socioeconómicos alimentarios de la economía popular, el cooperativismo y la agricultura familiar”.
Soberanía y seguridad alimentaria
El proyecto de investigación “Soberanía y seguridad alimentaria: desarrollo de un programa piloto de acompañamiento de PUPAs en la región de Tandil” está coordinado por las doctoras Nora Lía Padola, Rocío Colello y Juliana González.
Las mismas confirmaron que su trabajo fue seleccionado y recibió financiamiento en la convocatoria “Ciencia y Tecnología contra el Hambre” del Ministerio.
Según explicó Juliana González, a través del proyecto se desarrollará un programa piloto de acompañamiento de estas Pequeñas Unidades Productivas Alimenticias mediante la utilización de herramientas de diagnóstico situacional, monitoreo microbiológico y capacitación de los actores involucrados, tendientes a dirigir estrategias de prevención y disminución de los riesgos para la Salud Pública.
Asimismo, se desplegarán instrumentos que permitan la difusión y la concientización sobre la importancia de las buenas prácticas fundamentales para prevenir las Enfermedades de Transmisión Alimentaria (ETA).
Es importante destacar que, para abordar dicha propuesta se consolidó un equipo interdisciplinario de trabajo, integrado por actores del Ministerio de Asuntos Agrarios de la Provincia de Buenos Aires, la Dirección de Bromatología de Tandil, el Programa de la Economía Social y Solidaria (ESyS) de la Secretaría de Extensión de Unicen, las Secretarías de Extensión y Vinculación de las Facultades de Ciencias Humanas y Veterinarias e investigadoras de Conicet y de CIC pertenecientes al Laboratorio de Inmunoquímica y Biotecnología de Veterinarias, Unicen y al Civetan.
Además, reveló que cuenta con la participación de investigadoras, docentes, no docentes, extensionistas, estudiantes, organizaciones y productores de la ESyS, lo que “permitirá profundizar instancias de articulación inter-organizacionales e interuniversitarias que promuevan el asesoramiento científico-tecnológico”.
“Al mismo tiempo, se buscará sistematizar la experiencia con el objetivo de generar nuevas líneas de Prácticas Socio Educativas junto a organizaciones de la ESyS y Bromatología”, detalló.
Argentina contra el Hambre
Los trabajos elegidos tienen como objetivo impulsar y fortalecer la integración del conocimiento y de los desarrollos tecnológicos y sociales vinculados a soluciones para el acceso a la alimentación y al agua segura, así como al abordaje de la vulnerabilidad socio-ambiental y a la planificación nacional y local de las acciones comprendidas en el Plan Nacional “Argentina contra el Hambre”.
De este modo, se apunta a contribuir desde el sector científico-tecnológico y así potenciar las acciones públicas que busquen revertir problemáticas como la malnutrición infantil, la emergencia alimentaria y la pobreza en todo el territorio nacional.
Las propuestas seleccionadas contarán con un financiamiento total de más de 900 millones de pesos y se distribuyen en iniciativas de 45 proyectos de tecnología y producción de alimentos. 21 de tecnología para el acceso al agua y saneamiento, y 81 de investigación y desarrollo orientados con potencialidad de integración a políticas públicas enmarcadas en el Plan Nacional “Argentina contra el Hambre”.
Vale resaltar, que el proceso de selección incluyó la evaluación de 461 iniciativas por parte de 62 especialistas y la valoración institucional del Ministerio de Desarrollo Social, el Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales, la Secretaría de Agricultura Familiar, Campesina e Indígena del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, la FAO, el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), así como de las autoridades provinciales de Ciencia y Tecnología.
Fuente: Diario El Eco de Tandil