Ante la gran presencia de serpientes en la zona serrana, estudiantes de Medicina Veterinaria propusieron realizar charlas informativas en diversos espacios respecto de cómo actuar frente a encuentros con reptiles de la zona, cómo reconocer las especies y las consideraciones a tener en estas ocasiones.
Desde el grupo Fauna Serrano que nuclea a estudiantes de la FCV-UNICEN interesados en medicina, biología y conservación de fauna silvestre plantearon una Actividad Estudiantil de Extensión para intervenir en una problemática propia de la región.
“Proyecto Ofidios: prevenir, comunicar y conservar” fue pensado para informar sobre los accidentes ofídicos en diferentes puntos de la ciudad. Al vivir en un área serrana y con mucha actividad al aire libre, los jóvenes consideraron importante instruir a la comunidad sobre esta temática.
A partir de esto, plantearon el desarrollo de charlas con actividades didácticas en diferentes escuelas y centros barriales, donde abarcaron temas vinculados a la anatomía, comportamiento, reconocimiento de especies, mitos y verdades, primeros auxilios y rol ecológico de las serpientes.
Con la articulación de los Puntos de Extensión Territorial desembarcaron con su propuesta en el centro cultural El Cole de la organización social La Poderosa, ubicado en Villa Cordobita; ES 16 y EP 4 de Cerro Leones; EP 13 de María Ignacia Vela; y Escuela Granja “Dr. Ramón Santamarina”, atendiendo las particularidades y complejidades de cada comunidad. En tanto, la actividad se articula con otra iniciativa que presenta un dispositivo de trabajo similar, denominada “Cuidemos nuestras mascotas”.
Información para todos
En Villa Cordobita, los y las estudiantes asistieron al centro cultural en el horario de la merienda para conversar con los niños y niñas, adolescentes y adultos presentes.
A lo largo de la exposición y la muestra de material, chicos y adultos hicieron diversas preguntas sobre el tema con gran curiosidad y entusiasmo. En ese intercambio, surgió una de las creencias más arraigadas popularmente: la mordedura de una yarará -u otras especies presentes en el ecosistema local- es mortal.
Los jóvenes se encargaron de desmentir este mito y brindaron información certera acerca de cómo proceder frente a un ataque, además de responder dudas y compartir sus conocimientos al respecto, en pos de favorecer la conservación del territorio y el cuidado de la salud de las personas.
La actividad estuvo a cargo de lo/as estudiantes Eric Pastén Boeri, Tiziana Abigail Pagliardini, Daniela Cósser, Gianna de Fazy, Martina Ricciardi, Gimena Úbeda, Sol Rodríguez, Paula Jofre y Agustina Traverso, con la orientación de la docente María Laura Colman.
